Receta de frittata de calabacín y tomate

1. Precalentar el horno:  

Precaliente el horno a 190 °C (375 °F) y engrase ligeramente una fuente o sartén para hornear redonda.

2. Saltear las verduras:  

Calienta el aceite de oliva en una sartén a fuego medio. Agrega el calabacín y los tomates cherry. Espolvorea con ajo en polvo, sal y pimienta. Cocina durante 3-4 minutos hasta que se ablanden.

3. Prepara la mezcla de huevo:  

En un bol, bate los huevos y la leche hasta que se integren por completo. Agrega la mozzarella, el parmesano y el perejil picado.

4. Combine y hornee:  

Coloca las verduras salteadas de manera uniforme en la fuente o sartén para horno. Vierte la mezcla de huevo sobre la parte superior, asegurándote de que se distribuya de manera uniforme. Hornea durante 20 a 25 minutos o hasta que el centro esté listo y la parte superior esté dorada.

5. Servir:  

Dejar enfriar un poco, decorar con perejil fresco y cortar en gajos para servir.

Notas:

Mezcla de huevos: utilice huevos frescos para lograr una mejor textura. Bátalos bien con un chorrito de leche o crema para lograr una consistencia más esponjosa.

Calabacín: Opte por calabacines de tamaño pequeño a mediano, ya que son más tiernos y tienen menos semillas.

Tomates: Los tomates cherry o uva funcionan bien debido a su dulzura y bajo contenido de humedad, pero los tomates Roma en rodajas son una buena alternativa.

Queso: Las opciones populares incluyen queso feta, parmesano, cheddar o queso de cabra para agregarle más sabor.

Hierbas y condimentos: Las hierbas frescas como la albahaca, el tomillo o el perejil realzan los sabores. No olvides añadir sal y pimienta al gusto.

Consejos y trucos:

Precocinar las verduras:

Saltee ligeramente el calabacín y los tomates antes de agregarlos a la mezcla de huevo para eliminar el exceso de humedad y realzar su sabor.

Utilice una sartén apta para horno:

Una sartén de hierro fundido o antiadherente apta para horno le permite comenzar a cocinar en la estufa y terminar en el horno para obtener una cocción perfecta y uniforme.

Evite las frittatas empapadas:

Para evitar que la frittata quede aguada, asegúrate de que las verduras no estén demasiado mojadas. Seca el calabacín con toallas de papel después de cortarlo.

No cocine demasiado:

Hornee hasta que los huevos estén listos pero aún ligeramente temblorosos en el centro. Cocinarlos demasiado puede dar como resultado una textura seca.

Personalizar complementos:

Agregue cebollas salteadas, pimientos morrones, champiñones o espinacas para obtener más variedad y nutrientes.

Toques finales:

Para darle más sabor, espolvoree queso por encima antes de asar durante un minuto o dos para obtener un acabado dorado.

Almacenamiento y recalentamiento:

Guarde las sobras en un recipiente hermético en el refrigerador hasta por 3 días. Vuelva a calentarlas suavemente en el microondas o en el horno para evitar que se sequen.

Ideas para servir:

Combínalo con una ensalada verde o pan crujiente para una comida completa.

Sirva con una cucharada de crema agria, yogur griego o un chorrito de pesto para darle más sabor.

¡Esta frittata es sencilla, adaptable y perfecta para preparar comidas!