Instrucciones:
1. Preparar los ingredientes: Lava las espinacas frescas y escúrrelas bien. Limpia los champiñones con un paño húmedo y córtalos en láminas. Pica finamente los dientes de ajo. Corta el tocino en trozos pequeños.
2. Cocinar el tocino: En una sartén grande, calienta una cucharada de aceite de oliva a fuego medio. Agrega el tocino y cocina hasta que esté crujiente. Retira el tocino de la sartén y colócalo sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
3. Cocinar el pollo: En la misma sartén, añade otra cucharada de aceite de oliva si es necesario. Sazona las pechugas de pollo con sal y pimienta al gusto. Cocina las pechugas de pollo a fuego medio-alto durante aproximadamente 6-7 minutos por cada lado, o hasta que estén doradas y cocidas por completo. Retira el pollo de la sartén y déjalo reposar.
4. Saltear los champiñones y el ajo: En la misma sartén, agrega los champiñones y el ajo picado. Cocina durante unos 5 minutos, o hasta que los champiñones estén tiernos y dorados.
5. Añadir las espinacas y la crema: Incorpora las espinacas a la sartén y cocina hasta que se marchiten. Luego, agrega la crema de leche y mezcla bien. Cocina a fuego lento durante unos minutos hasta que la salsa esté caliente y cremosa. Ajusta la sal y la pimienta al gusto.
6. Combinar todo: Corta las pechugas de pollo en tiras o déjalas enteras, según tu preferencia. Agrega el pollo a la sartén con la salsa cremosa de espinacas y mezcla para cubrir bien el pollo con la salsa.
7. Servir: Sirve el pollo salteado en platos, espolvorea el tocino crujiente por encima y disfruta de este delicioso plato. Puedes acompañarlo con arroz blanco o puré de patatas para una comida completa.
Consejos adicionales: Para un toque extra de sabor, puedes añadir un poco de queso parmesano rallado a la salsa antes de servir. También puedes decorar el plato con algunas hojas de espinaca fresca. ¡Buen provecho!”