Pollo frito crujiente

7. Los pedazos de pollo solo deben introducirse en el aceite una vez que este esté caliente. Antes de meterlos a freír, vamos a pasar cada pieza por la mezcla de huevo y leche, de manera que toda su superficie quede bien impregnada, y luego por el plato con la mezcla de harina, para que esta se pegue a la superficie mojada del pollo.

8. Hay que rotar o voltear bien la pieza al momento de pasarla por la harina, de manera que esta se adhiera por todas partes.

9. Ahora sí, a sumergir en el aceite caliente a cada pieza que haya pasado por el proceso anterior. Como la idea tampoco es quemarse, si el aceite empieza a saltar, podemos bajar el fuego ligeramente, pero no tanto como para que el aceite deje de estar caliente.

10. Hay que prestar atención a que las piezas no se peguen entre ellas mientras se fríen. Lo mejor es dejar un espacio para que se cocinen bien. También está bien no meter demasiadas piezas en el sartén al mismo tiempo, ya que esto disminuiría la temperatura del aceite.

11. Hay que vigilar las piezas e irlas rotando para que todas sus caras se cocinen. De hecho, en principio, si verdaderamente tienes una buena cantidad de aceite en el sartén, casi ni tendrás que mover cada pedazo de pollo, porque el aceite caliente lo cubrirá por todas partes.

12. Una vez que cada pieza de pollo esté bien dorada y cocida por toda la superficie, qué hay que sacarla y escurrirla. Yo acostumbro pasarlas a un plato cubierto con papel absorbente, para retirar el exceso de grasa antes de servirlas.

13. Hay que seguir el proceso mencionado con cada pieza, hasta que estén todas cocidas. Si hiciera falta, hay que verter más aceite en el sartén.

Pages: 1 2

Post Comment