¡Leche condensada batida con limón! ¡Te sorprenderás! ¡Dios, qué helado más delicioso!
¡Absolutamente! La combinación de leche condensada y limón es una explosión de sabor en cada bocado. Es una opción refrescante y deliciosa, perfecta para cualquier ocasión.
¿Quieres que te comparta una receta para que puedas prepararlo en casa?
Aquí tienes una opción básica:
Helado de Leche Condensada y Limón
Ingredientes:
- 1 lata de leche condensada
- Jugo de 3-4 limones grandes
- Ralladura de 1 limón
- Opcional: unas gotas de extracto de vainilla
Preparación:
- Mezcla los ingredientes: En un recipiente grande, mezcla la leche condensada, el jugo de limón y la ralladura de limón. Si deseas un sabor más intenso a vainilla, añade unas gotas de extracto de vainilla.
- Congela: Vierte la mezcla en un recipiente hermético y congélala durante al menos 4 horas, o hasta que adquiera una consistencia cremosa.
- Batir: Cada hora, saca el recipiente del congelador y bátelo con una batidora eléctrica durante unos minutos. Esto ayudará a romper los cristales de hielo y a obtener una textura más suave y cremosa. Repite este proceso varias veces.
- Servir: Una vez que el helado tenga la consistencia deseada, sirve en copas y decora con ralladura de limón o unas hojas de menta.
Consejos:
- Acidez: Si prefieres un sabor menos ácido, puedes reducir la cantidad de jugo de limón.
- Dulzor: Si deseas un helado más dulce, puedes añadir un poco de azúcar.
- Textura: Para una textura más ligera, puedes añadir un poco de crema batida a la mezcla antes de congelar.
- Adiciones: Puedes personalizar tu helado añadiendo frutas frescas como fresas o frambuesas, o incluso un poco de licor.
¿Quieres probar alguna variación? ¡Te dejo algunas ideas!
- Helado de limón y coco: Añade coco rallado a la mezcla.
- Helado de limón y albahaca: Agrega unas hojas de albahaca fresca al batir.
- Helado de limón y jengibre: Ralla un poco de jengibre fresco y añádelo a la mezcla.
¡Anímate a experimentar y crear tu propia versión de este delicioso helado!
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