Flan de Galletas María Sin Horno

Preparar el molde:

Vierte una capa de caramelo líquido en la base de un molde para flan o un recipiente redondo. Asegúrate de cubrir toda la superficie. Reserva.

Preparar la mezcla:

En una cacerola grande, coloca la leche y el sobre de flan en polvo. Si el flan en polvo no lleva azúcar incluida, añade la 1/2 taza de azúcar en este paso.

Lleva la mezcla a fuego medio y remueve constantemente con unas varillas para evitar grumos.

Incorporar las galletas María:

Antes de que la leche empiece a hervir, rompe las galletas María en trozos pequeños y añádelas a la mezcla.

Remueve bien y cocina a fuego bajo, batiendo continuamente, hasta que las galletas se disuelvan y la mezcla comience a espesar (unos 5-7 minutos). Si prefieres una textura

completamente lisa, puedes licuar la mezcla antes de que espese.

Verter en el molde:

Una vez que la mezcla esté lista, viértela cuidadosamente sobre el molde con el caramelo líquido.

Alisa la superficie con una espátula y deja enfriar a temperatura ambiente.

Enfriar:

Una vez que el flan se haya enfriado un poco, cúbrelo con papel film y colócalo en el refrigerador durante al menos 4-6 horas, o hasta que esté completamente cuajado.

Para desmoldar, pasa un cuchillo por los bordes del molde y dale la vuelta sobre un plato grande.

Sirve frío y decora con galletas María adicionales, si lo deseas.

Consejo:

Este flan es ideal para reuniones familiares y, aunque no lleva horno, su textura es cremosa y deliciosa. Puedes añadir un toque de canela o ralladura de limón para un sabor extra.