- Calienta una sartén antiadherente a fuego medio y unta con un poco de aceite o mantequilla para evitar que se pegue el pan.
- Vierte la mezcla en la sartén, formando un círculo de tamaño mediano (aproximadamente del tamaño de un pan de hamburguesa).
- Cocina durante unos 4-5 minutos por un lado, hasta que veas que se forman burbujas en la superficie del pan y que el borde comienza a dorarse.
4. Voltear el pan:
- Con mucho cuidado, voltea el pan con una espátula y cocina por el otro lado durante 3-4 minutos más, hasta que esté dorado y cocido por completo.
5. Servir:
- Una vez cocinado, retira el pan de la sartén y deja reposar durante un par de minutos para que se asiente.
- ¡Listo! Ahora puedes disfrutar de tu pan de maicena calentito, recién hecho. Puedes comerlo solo, con mantequilla, mermelada, o incluso usarlo como base para sándwiches.
Consejos:
- Ajuste de textura: Si prefieres un pan más esponjoso, puedes añadir un poco más de polvo de hornear o incorporar 1/4 de cucharadita de bicarbonato de sodio.
- Pan con más sabor: Puedes añadir hierbas secas, como romero o orégano, si quieres darle un toque salado. Para una versión dulce, puedes agregar un poco de azúcar o canela.
- Tamaño del pan: Si prefieres panes más pequeños o individuales, puedes hacer pequeñas porciones de masa y cocinarlas de forma similar, ajustando el tiempo de cocción según el tamaño.
Beneficios de esta receta:
- Sin gluten: La maicena es naturalmente libre de gluten, por lo que este pan es perfecto para personas que siguen una dieta sin gluten.
- Rápido y fácil: Este pan se prepara en minutos, sin necesidad de horno ni levadura, lo que lo hace ideal para esos momentos en los que necesitas algo rápido y delicioso.
- Versátil: Puedes personalizarlo fácilmente con ingredientes adicionales para adaptarlo a tus gustos, ya sea salado o dulce.
Conclusión:
Con esta receta de pan de maicena en sartén, tendrás un delicioso pan casero, esponjoso y suave en tan solo unos minutos, ¡sin necesidad de horno! Perfecto para un desayuno rápido, un snack en cualquier momento del día o para acompañar tu comida. ¡Pruébalo y disfruta de la magia de un pan casero que puedes hacer al instante!