Preparación
Los chiles se asan, se pelan y se abren con mucho cuidado para rellenar, se despepitan, se desvenan, se lavan y se secan.
El queso oaxaca se desmenuza y con ésto se rellenan los chiles.
Las yemas de huevo se baten muy bien con un poco de sal; las claras se baten a punto de turron y se mezclan con las yemas en forma envolvente.
Los chiles rellenos y asegurados con un palillo se pasan harina y luego por el huevo, se fríen en aceite bien caliente, se escurren y se van poniendo sobre papel absorbente.
Coloca los tomates, la cebolla, los ajos y una taza de caldo de pollo en la licuadora y moler perfectamente.
Fríe la salsa de tomate por unos 10 minutos hasta que empiece a espesar, agrega sal al gusto.
Buen provecho
anuncio