Cazuela abundante de pasta y carne

Direcciones:

Picar finamente la cebolla y rallar el ajo.
Calienta un poco de aceite de oliva en una sartén a fuego medio.
Añade la cebolla picada y saltea hasta que esté blanda y traslúcida.
Añade el ajo rallado y sofríe durante un minuto más.
Cocinar la carne:
Añade la mezcla de carne molida de cerdo y carne de res a la sartén.
Condimentar con sal, pimienta negra y orégano.
Cocine a fuego lento durante unos 10 minutos hasta que la carne esté completamente cocida y los sabores se combinen.
Cocine la pasta:
Llena una olla con agua y añade una pizca de sal y un chorrito de aceite de oliva.
Pon el agua a hervir y luego añade la pasta.
Cocine según las instrucciones del paquete hasta que esté al dente.
Escurre la pasta y colócala en un bol grande.
Prepare la salsa blanca:
En otra sartén, derrita la mantequilla a fuego medio.
Añade 2 cucharadas de harina y mezcla bien para formar un roux.
Añade la leche poco a poco, removiendo constantemente para evitar grumos.
Continúe revolviendo hasta que la salsa comience a hervir y espese.
Combine la pasta y la salsa blanca:
Vierta la salsa blanca sobre la pasta cocida y revuelva para combinar.
Montar la cazuela:
Precalentar el horno a 180°C (360°F).
Lubricar tres fuentes para horno con aceite de oliva.
Extiende una capa de la pasta con salsa en cada plato.
Añade una capa de la mezcla de carne molida encima de la pasta.
En una sartén aparte, calentamos un poco de aceite de oliva y sofreímos el tomate picado hasta que se ablande.
Añade la salsa de tomate a la sartén y mezcla 2 cucharadas de harina para espesar la salsa.
Extiende esta mezcla de tomate sobre la capa de carne en los recipientes para hornear.
Añade otra capa de pasta encima.
Cubierta con queso:
Rallar el queso y espolvorearlo generosamente sobre la parte superior de los guisos.
Hornear:
Coloque las cazuelas en el horno precalentado.
Hornee durante unos 30 minutos hasta que el queso esté dorado y burbujeante.

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