Preparación:
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Precalienta el horno a 180°C (350°F) y engrasa tu molde favorito.
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En un bol grande, bate los huevos con el azúcar hasta que la mezcla esté clara y espumosa.
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Añade el aceite, la leche, el yogur y la vainilla. Mezcla bien.
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Incorpora poco a poco la harina tamizada con el polvo de hornear y la sal. Mezcla con movimientos envolventes para no perder el aire.
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Vierte la mezcla en el molde y hornea durante 35-45 minutos, o hasta que al insertar un palillo, este salga limpio.
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Deja enfriar sobre una rejilla… ¡y listo para disfrutar!
Tips adicionales:
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Si quieres que quede aún más húmedo, puedes bañarlo con un almíbar ligero de vainilla o cítricos al salir del horno.
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También puedes usar esta base para hacer bizcocho marmoleado, de chocolate, con frutas o rellenos.